Carlos Pavon Flores y Francisco Torres Rivas (camisa cuadros) durante una visita a Valladolid ( foto; archivo) |
Valladolid
Yuc. A 5 de marzo de 2019. Si algo le ha cobrado factura al priismo
vallisoletano es la imposición de sus líderes y candidatos, por eso llevan 2
administraciones perdidas por culpa de la cúpula que no respetó la decisión de
los militantes.
Como se recordará en las
elecciones del 2015 impusieron a Mario Peniche Cárdenas como candidato, en el 2017
sin la opinión de la militancia eligieron por “dedazo “al presidente del comité
directivo municipal Roberto Vera desde ahí ya se venía venir el fracaso del
tricolor sin embargo la gota que derramo el vaso fue la candidatura a
presidente municipal de Leonel Escalante Aguilar impuesto por la cúpula priista
que a la postre llevo la fractura interna.
Sin embargo, en esta ocasión
por fin la militancia afiliada tendrá la oportunidad de elegir a través de
votaciones secretas al presidente del comité directivo estatal.
El candidato del pueblo
que más aceptación tiene es Diego Lugo Interian quien es del municipio de
Sucila como se recordara se escribió el pasado domingo en la casa del pueblo y demostró que es el que más aceptación tiene ya que ha dicho que con él se
acabaran los “dedazos” para elegir candidatos además que es el único que no
tiene “padrinos” y busca devolverles a los priistas su partido.
El otro candidato que busca imponer la cúpula priista
de Mérida es Francisco Torres Rivas quien es amigo íntimo de los “dinosaurios” Priistas
como Ivonne Ortega Pacheco, el “gordo” Marín, Liborio Vidal Aguilar entre
otros.
Los priistas
Vallisoletanos antes de dejar que les impongan candidato deberán recordar, por
qué han perdido elecciones y ahora que tienen en sus manos elegir a alguien del
pueblo para que tome las riendas del partido tricolor a nivel estatal lo pueden
hacer.
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